Gabriel Mendoza y Flora Solano se casan por error. Él la salva anónimamente en un robo, luego pide el divorcio. Considerando al abuelo de ella, acuerdan un matrimonio temporal, descubriendo que el destino los ha unido desde el principio.
Mona Ruiz, criada en un orfanato, se sacrifica para que su novio Yoel Cruz pueda estudiar. Cuando él entra en el Grupo Valles, la humilla en público casándose con una rica. Pero Mona es la hija perdida del magnate Valles, y su padre viene a hacer justicia.
Tras viajar en el tiempo, Flora Lima fue rechazada por su familia, pero con su carácter ganó respeto. Se acercó a Daniel Santos para volver a su mundo, lo ayudó con su saber moderno y se convirtió en escritora. Al final, eligieron quedarse juntos.
A los 6 años, Rosa fue acusada falsamente y desterrada por su propia familia. Diez años después, regresa para enfrentar a quienes la traicionaron. Cuando su padre exige que se case con el lisiado Séptimo Príncipe en lugar de su hermana, ella demostrará que subestimarla fue su último error.
En un mundo de hombres lobo, Adriana y su hermana sufren el maltrato de su familia adoptiva. Adriana huye de un matrimonio forzado y conoce a Christian. Se casan por impulso y se enamoran a pesar de algunos malentendidos. En medio del peligro, se descubre que Christian es un alfa y el secreto del pasado de Adriana.
Valeria no lo descubre hasta el final, pero él la ha protegido hasta su último aliento. Esta vez le toca a ella protegerlo, enfrentándose a los parientes que tratan de aprovecharse de él y a los enemigos que intrigan en la sombra.
Olivia es obligada a casarse con el fracasado que su hermana dejó. Pero él no es quien aparenta: es un alfa imparable, tan rico como peligroso… y ya ha decidido que ella será suya.
Azul es humillada por su familia y muere llena de rencor. Tras renacer, decide cambiar su destino y aprovechar su talento en los negocios para forjar una vida propia. Sin embargo, cuando comienza a triunfar, su familia finalmente reconoce sus errores y se arrepiente.
Ella, científica famosa atrapada en una novela, ahora es princesa consorte despreciada. No se rindió: venció a su esposo infiel y su amante, usó su conocimiento para crear inventos revolucionarios y conquistó a la familia imperial.
Laura estuvo al borde de la muerte esa noche en el mar. Todo era oscuridad hasta que una mano la sacó de las olas: Nelson, jefe del Escuadrón Águila. Desde entonces, él es su luz y su secreto más profundo. Nunca se atrevió a confesarlo. Ahora, el destino los reúne, pero no todo corazón sobrevive al reencuentro.
La protagonista, Serena, es abandonada por Meyer, un hombre ingrato. Por casualidad, se casa rápidamente con el protagonista, Luis, y su vida da un giro espectacular, triunfando contra todo pronóstico. A medida que su relación se profundiza, se revela que Serena y Ximena fueron intercambiadas a la identidad. La verdadera identidad de Serena, quien creció en la pobreza, es la auténtica hija de la familia Qi, mientras que Meyer, quien pensaba haber encontrado una gran oportunidad, resulta estar junto a una impostora.
Serena es acosada en la universidad y maltratada en casa. Durante un chequeo médico de rutina, por confusión es inseminada artificialmente, y queda embarazada del hijo de Bart, un rey lobo temible y supuestamente infértil. Se casan por el niño, pero nadie imaginaba que el frío y ambicioso Bart se acabaría enamorando de ella.
La diosa Valeria se casa con Don Leonardo para cumplir una promesa familiar. El día de la boda, él despierta del coma, desatando una divertida y romántica guerra entre una mujer todopoderosa y un jefe imponente.
Mía, una joven considerada de mal agüero por sus predicciones, posee un don que atrae la buena fortuna. Tras ser acogida por Lucía, la esposa del general, en su mansión, su sola presencia hizo florecer las plantas y revivir a los animales, revelando habilidades que superaban toda expectativa.
Nina y Dainel, tras pasar una noche juntos, tuvieron un niño y una niña. Pero el cuñado de Nina vendió al bebé varón y la engañó que solo había dado a luz a una niña. Años después, Daniel logró encontrar al niño y, mientras buscaba a la madre biológica de su hijo, el destino lo llevó a casarse con Nina mediante un acuerdo.